A lo largo de su historia ha ido sufriendo modificaciones, ampliaciones, y cambios que lo han transformado gradualmente, y que le han cambiado la cara una y otra vez.
Esta semana, a lo que es puntualmente la fachada que da hacia la plataforma y las pistas, se le ha agregado un detalle no menor: Fue intervenido después de muchos años de remodelaciones, obreros, escombros y polvillo, con el cartel que lo distingue como el “Aeropuerto Internacional Córdoba”.
Esto representa la primera impresión del pasajero que recién llega a esta ciudad, ya sea por negocios, vacaciones, o cualquier tipo de compromiso, que lo trajo en avión hasta la docta.
Puede parecer un detalle menor, pero es parte de la estética que adorna y redondea la finalización de las obras que demoraron varios años en terminarse. Es la frutilla del postre.
Por fin, se puede decir que el aeropuerto está listo, aunque al corto plazo ya se acerca otro gran desafío: Recibir a Air Europa, Sky Airline y Avianca.
Las principales diferencias son sin dudas la ausencia de la torre de control histórica, y el cambio de dos mangas de madera por cuatro de vidrio.
Otro cambio fue la ausencia del letrero en un principio, aunque luego llego el que mencionaba “Aeropuerto Córdoba”.
Desde 1995 llego el que decía “Aeropuerto Internacional Córdoba, Ingeniero Aeronáutico Ambrosio Luis Vicente Taravella”, para luego quedar durante algunos años sin carteleria.
Finalmente hoy podemos ver el que orgullosamente afirma “Aeropuerto Internacional Córdoba”.
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