Los Ángeles es una ciudad a la que no le faltan museos de aviones, o afines al tema.
Uno de ellos es el “Flight Path Museum”. Un espacio creado dentro de LAX Airport (en el extremo sur del mismo), en donde se encuentra quizás, un lugar del que debe haber muy pocos en el mundo.
Allí radica el museo de la historia de la aviación comercial, en donde en una distribución de varios ambientes, esta la historia viva de las actuales y antiguas compañías aéreas estadounidenses, tales como TWA, Bonanza Air Lines, PANAM, American Airlines, y otras no estadounidenses como Mexicana, BOAC, entre otras.
De cada compañía hay objetos originales donados, o por aficionados, o por las mismas compañías aéreas, que han hecho de este lugar, un lugar imperdible, y digno de visitarlo tranquilo durante varias horas.
Entre las cosas que podemos llegar a encontrar ahí de cada aerolínea, hay timetables, uniformes de tripulaciones, vajillas, maquetas de todos los tamaños, equipajes, relojes, neceser, y muchas cosas más.
Flight Path Museum, muestra además el desarrollo y el crecimiento del LAX Airport a través de las décadas, con fotografías históricas, relatos, y objetos originales del mismísimo aeropuerto.
Este museo tiene inclusive una aeronave Douglas DC 3 que antiguamente voló para TWA y luego terminaría usándose para vuelos privados. La misma, es posible de visitarla libremente. De más esta decir, que como todo lo aeronáutico que vimos durante nuestro viaje, la aeronave está en perfecto estado de conservación.
Pero si algo mas podría sumársele a este museo (y que encima lo tiene), es que esta a escasos metros de la plataforma de vuelos cargueros. Es decir que desde ahí, también es posible hacer spotting, y ver muy de cerca a los aviones gigantes que aterrizan en LAX, y que operan en el sector sur del predio.
Como será de apto para spotters este lugar (como toda la ciudad), que desde el museo puede oírse a través de un receptor de VHF, las comunicaciones de la torre de control de LAX con todos los aviones que llegan o salen. A esto hay que sumarle el wi fi gratuito, que nos permitió utilizar Flight Radar 24, con todos los beneficios que eso puede traer a un spotter.
Como este lugar es un museo, pero además es un spotting location, separamos la parte 2 y 3 de este viaje, en un mismo sitio, pero a su vez la unificamos en un mismo informe.
Recuerden de Flight Path Museum, porque será clave en lo que sucedió en la jornada siguiente, y que veremos en un artículo próximo.
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